lunes, 12 de enero de 2009

Ni veo la nieve


Iba a ser una tormenta del copón, pero ni un copo de nieve me ha rozado. Los más optimistas decían, el jueves, que la llovizna que empezaba a caer era una nevada que no cuajaba, pero, al final, a mí tan sólo me mojó el chaparrón que anegó las carreteras cartageneras el sábado por la noche.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Vaya. Como bien dice el dicho... ¿Me lo dices o me lo cuentas?.
Iba por la autovía a 70km/hora. No podía ir a más velocidad.
Por que el chaparrón al que te refieres, cubría de inmensa lluvia las líneas de la carretera, y era imposible visualizarlas.

Anónimo dijo...

Personalmente, hubiera preferido hacer un parón a causa de la nieve (para verla e incluso tocarla) que tener que aminorar la marcha debido a la lluvia.